¡ATLAS CAMPEÓN!

¡ATLAS CAMPEÓN!

Por Jesús González Weeks

“Dedicado a todos los Rojinegros que ya no están con nosotros”

La grandeza de un equipo no se mide en copas, sino en la pasión que genera, los aficionados Rojinegros, sin duda alguna, tenemos a el equipo más grande de México. Los Atlistas tenemos un grito encerrado, tenemos una alegría por recibir, tenemos un orgullo intacto y una fe ciega; así somos los del Atlas, así somos la “Fiel”.Fue un 22 de abril de 1951, donde nuestros abuelos y padres gritaron ¡ATLAS CAMPEÓN!, un día imborrable para nuestras familias y para los anales de la historia, el Atlas fue el primer campeón de Jalisco, ganándole a las “chivitas correlonas”; que mejor manera de ponerle la cereza al pastel.Fue en el viejo Estadio del Oro, donde se logró coronar una excelente temporada, el mejor equipo por mucho, desplegando un fútbol ofensivo y alegre que hacia palpitar las tribunas; un estilo de juego, que empezó no solo a enamorar a los “sin equipo” y a los ateos del futbol; sino a todos los afortunados aficionados al futbol de la época.El campeonato se logró, a lo Atlas.Un penal muy claro para la parcialidad Rojinegra y un robo para los seguidores de los “Rayados”. Marcación dudosa por parte del colegiado. Pero que al fin de cuentas nos dio el único campeonato de nuestra historia; un orgullo para nosotros los Rojinegros. Los fieles Atlistas, tienen razón, “El rey se corona una vez”.Una estrella en la camiseta es motivo de orgullo y es suficiente para enaltecer a nuestros colores y a nuestra Institución. El Rojinegro no sigue la corriente de la moda, no es villamelón, no se le voltea a su equipo; escoge a su equipo por amor, no por mercadotecnia; decide amar ciegamente a su camiseta, sabiendo que difícilmente será correspondido. Los aficionados Rojinegros somos soñadores, valientes, pacientes, enamorados, creativos, un clan único, somos Rojinegros.El Atlas es grandeza, pasión, orgullo, dignidad, paciencia, fe, unidad, familia, amor.

Hoy 22 de Abril, debemos de estar contentos, orgullosos y agradecidos con todas las personas que participaron en la obtención de la corona, a los jugadores, cuerpo técnico, directivos y aficionados, a todos ellos muchas, pero muchas gracias; siempre los recordaremos.

¡Mil veces, arriba el Atlas!--